La nube es una representación de la metamorfosis. Su forma apenas fija, cambia. La patria del poeta -lo decía el poeta alemán Jean Paul- es una patria de nuebes, una Wolkenheimat. El horizonte hacia el que corren las nubes es el otro país, el "autre monde": un país cuyo perfil está totalmente diseñado en el interior del poeta y, al mismo tiempo, es un espejismo, se muestra como el auténtico habitar y se halla envuelto en la niebla de lo desconocido. Sueño, idea, música de otro lugar que transforma su encanto en linea de horizonte a partir de la cual puede criticarse el tiempo presente, la crueldad y la ausencia de "apertura" que habita el tiempo presente.